GRUPO DE ESTUDOS AVANÇADOS ESPÍRITAS

Fundado em 15 de Outubro de 1992
Boletim Semanal de Distribuição Eletrônica



Ano 07 - Número 349 - 1999                         15 de junho de 1999

Indíce
Textos Comentários Painel

Textos
Como elaborar artigos espíritas, Carlos Pereira, Brasil

(Da homepage do IPEPE - http://www.ipepe.com.br)

    Há, de uma maneira geral, uma certa dificuldade dos espíritas em escreverem artigos. Acreditam ser mais simples falar sobre Espiritismo, mas ressentem-se em escrever sobre a doutrina. O drama aumenta quando se solicita que sejam redigidos artigos para o público não espírita. A linguagem de um difere do outro porque o espírita, sendo um iniciado, já possui conhecimentos prévios e daí alguns termos e raciocínios podem ser utilizados sem preocupação. Para o leigo, no entanto, o enfoque deve ser diferente.

    Termos como perispírito, erraticidade, psicografia e assim por diante só devem ser colocados com a devida explicação. Os princípios básicos da Doutrina Espírita como reencarnação, mediunidade, obsessão, lei do progresso ou lei de causa e efeito, por exemplo, são enunciados aceitos por nós espíritas, mas não necessariamente pelo não espírita, daí importa a utilização de argumentos lógicos e consistentes de convencimento. Algumas abordagens que possam parecer pretensiosas como "ser o Espiritismo a terceira revelação de Deus para os homens" ou "o Espiritismo é o futuro das religiões" devem ser evitadas. Outro aspecto é verificar o que é relevante para ser dito externamente. Há assuntos que são de domínio interno do movimento espírita e não interessam estar em jornais de circulação ampla.

    Quanto à definição do tema é interessante se perguntar: o que as pessoas gostariam de saber sobre Espiritismo? Perceba que os noticiários dos jornais, das revistas e da televisão fornecem uma excelente matéria prima para a escolha de um mote para escrever. Afinal, é a Doutrina Espírita que possibilita a leitura espiritual dos fatos. Mostrar o outro lado da notícia gera uma ótima expectativa do público e torna o Espiritismo contemporâneo, atual. Neste sentido, o título do artigo deve ser sugestivo, precisa despertar a curiosidade para a leitura. De preferência sintético, de rápida visualização e compreensão.

    O artigo deve primar pela objetividade, clareza e lucidez de conteúdo. Nada de rebuscamentos, palavras difíceis e construções longas e cansativas. Lembre-se que uma característica dos espíritos superiores é a sua capacidade de falar muito com poucas palavras. Comece, portanto, a exercitar seu lado de espírito evoluído, pois ninguém nasceu com a sabedoria da redação perfeita, que é um talento desenvolvido de outras existências como todos os outros.

    Consulte, se for necessário, livros de reconhecida coerência doutrinária para evitar qualquer deslize de conteúdo. Submeta o artigo à crítica dos outros e tenha humildade para acatar o retorno das impressões e aperfeiçoá-lo quantas vezes precisar. Quem está fora do contexto de produção literária tem sempre uma percepção privilegiada ao contrário da pessoa que está envolvida intelectual e emocionalmente. O bom artigo é sempre um produto inacabado por melhor que ele se apresente. Recorra ao dicionário ou a um livro de gramática se tiver dúvidas, não confie na memória. O artigo é você numa folha de papel que será analisado por todos que tiverem acesso a ele.

    Não se furte de pedir a inspiração dos seus amigos espirituais, eles existem para lhe auxiliar também nestas horas, o que facilitará, sobremaneira, o desenvolvimento das idéias. Idéias estas que devem formar um corpo único, com começo, meio e fim. É recomendável não deixar perguntas no ar ou raciocínios inacabados, embora o bom artigo seja aquele em que o leitor diga no final: "já acabou?"

    Acabou. Até outra!
    Carlos Pereira

(Nota do IPEPE: Transcrito do "ADE-PE  Informe" de jan/fev/mar/abr/1999, pertencente à  Associação de Divulgadores do Espiritismo de Pernambuco )



Un Documento Singular, Grupo Espírita de La Palma, España

(Texto enviado por Johnny M. Moix para a lista usuário-hispano do Canal #Espiritismo/España  - http://www.irc-espiritismo.org.br/espana)

EL COMENTARIO AL "PADRE NUESTRO" DEL PROFESOR ASMARA

    Rescatamos en el presente artículo un documento singular tanto por su contenido como por las extraordinarias circunstancias en que fue concebido, un documento que nos atreveríamos a calificar de excepcional.

    El autor del "Comentario al Padre Nuestro" que traemos aquí, fue el Profesor Asmara, pseudónimo utilizado por el Sr. Eduardo Anaya Mena (1), figura destacadísima del último periodo glorioso del Espiritismo español, que se vio dramáticamente truncado por el desastre de la fratricida guerra civil. El Profesor Asmara ostentó, entre otros cargos, el de presidente de la Federación Espiritista Española, y en el Congreso Espiritista Internacional de Barcelona celebrado en 1934, resultó elegido presidente de la F.E.I. (Federación Espiritista Internacional).

    El documento que presentaremos seguidamente fue realizado y leído en el penal del Puerto de Santa María (Cádiz), un día del año 1941, donde el Profesor Asmara estaba entonces prisionero por orden de las autoridades fascistas, al amparo del "tribunal de represión masónica" bajo la acusación de ser "hombre libre y honrado", con el agravante de "espiritista", junto a un importante grupo de masones españoles, entre los que figuraba el Dr. Eduardo Alfonso. Éste, cumpliendo una promesa que hiciera a sus compañeros de cautiverio, publicaría dicho texto y narraría aquella penosa experiencia con sus circunstancias, en una obra que tituló "La Masonería Española en el Presidio", libro que bajo el pseudónimo de "Prisciliano", vio la luz pública en 1983 (2).

    Veamos como el Dr. Eduardo Alfonso relata los pormenores que rodearon la génesis de este "Comentario al Padre Nuestro": (3)

    "Al final de uno de los pasillos del piso alto, había un pequeño desván que conocíamos con el pintoresco nombre de la "zorrera". En este sitio oscuro y miserable, entre los otros cuatro compañeros, hacía su vida carcelaria el más atildado caballero de todos los hermanos masones... Paseaba, en efecto, por entre la inmundicia del presidio con el traje impecable, cuello almidonado, botines grises sobre zapatos irreprochablemente brillantes y oliendo a "Varón Dandy". Aquel caballero de modales distinguidos, correctísimo en su conversación y siempre con un elegante dominio de sí mismo, ejercía además una caridad silenciosa con los compañeros pobres, y al decir muchos "hablaba con los espíritus"... El excelente compañero que compartía con nosotros las tribulaciones del presidio, era miembro gerente de una sociedad mercantil madrileña y había sido el número uno de la metapsíquica europea y esperaba la libertad, como cualquier "chorizo", de la magnanimidad del Caudillo".

    " (...) Un día nos llamó a la "zorrera" y entre aquellas paredes mugrientas, sentados sobre los humildes petates y bajo la luz tamizada por la hojarasca que entraba por la alta ventana del desván, sacó ceremoniosamente del bolsillo unos papeles y nos dijo: "Quiero que oigan ustedes este comentario al Padre Nuestro que he escrito".

    Y he aquí lo que el Profesor Asmara leyó:

    "Padre Nuestro:/ tú que estás sobre todas y en todas las cosas,/ antes que sus causas y tras sus efectos, /en un infinito que lo abarca todo,/ lo uno y lo diverso./ Padre Nuestro que estás inmanente en el Todo:/ arriba y abajo; muy alto en el cenit, / muy bajo en la hondura, bajo nuestro suelo,/ aunque el hombre te adore en la altura,/ cuando ignora que en ella navega "su mundo";/ que estamos flotando en el cielo.

    Cada cual santifica Tu Nombre/ según su potencia de conocimiento:/ según lo que alcanza,/ con la inteligencia o con el sentimiento,/ poderes benditos,/ que nos van acercando al Misterio/ tras el cual te escondes mientras progresamos/ en la ruta infinita del tiempo.

    Sea venido a nosotros Tu Reino:/ por estar en él "somos"; en él "existimos",/ bajo todas las formas de vida/ que Tú has deparado,/ en cadena sin fin de experiencias,/ anhelos, herencias y cambios de estado;/ juez omnipotente,/ de causas primeras y causas finales,/ contingencias de libre albedrío,/ en circuitos de leyes fatales./ Fluir aparente de luces y sombres de bienes y males,/ siempre relativos y convencionales,/ pero que nos ligan a lo trascendente. Así yo concibo Tu Reino,/ con mil horizontes, moradas y planos;/ reinando por todo tus leyes,/creándolo todo tus manos;/ siendo Tú el venero/ de lo Bueno, lo Bello y lo Justo,/ que es lo Verdadero./ Y así se encadena/ tomando sentido moral y fecundo/ la vida terrena: "Estar en el mundo/ De tres dimensiones"/ donde nos acucian oscuros problemas,/ y grandes miserias ybajas pasiones/ para "ser" más allá de ese mundo;/ en el otro reino que viene o que espera,/ en el cual la vida sigue mansamente/ su eterna carrera.

    Hecha está Tu Voluntad,/ así en la Tierra como en el Cielo:/ por doquier asoma, por doquier la vemos/ cuando alumbran buscando el arcano/ las luces inquietas del entendimiento.

    El pan nuestro nos diste por siempre,/ Providente y Bueno./ Antes que naciera el "homo sapiens"/ y en la bestia humilde/ el imperativo de hacer que comerlo./ Mas, aunque lo diste con pródiga mano,/ has determinado para que fuera "nuestro"/ que cada uno gane, con trabajo propio,/ pan para su alma y pan que nutra el cuerpo.

    Yo sé que a tus ojos/ están perdonadas mis deudas; que todas mis culpas/ no son más que formas de yerro:/ ignorancias que iré cancelando,/ amando y sufriendo,/ mientras subo la escalera gloriosa/ del "semper ascendens";/ la ruta bendita de luz y progreso/ donde santificas a todos los seres/ que pueblan los mundos que van por los cielos./ Y en ese camino, / donde se proyecta todo mi futuro,/ y está mi pasado y vive lo eterno,/ cuanto más alcanzo, más te entiendo,/ tanto más perdono las ajenas deudas,/ tanto más disculpo el error ajeno.

    Déjame caer en la tentación de pecados,/ que pueda medirlos mi discernimiento;/ que al librarse de ellos, por mi propio motivo y esfuerzo,/ podré demostrar ante mi y ante todo otro ser,/ que, al orar,/ He sabido sentir, meditar, querer;/ que dentro de mí/ hay un ente que "sabe creer".

    Haz que mis hermanos mayores/ me libren del mal/ cuando yo no pueda valerme y vencerme./ Seres de otro plano, entes de otro cielo,/ que, obrando en Tu nombre,/ Puedan influir en las cosas del suelo./ ¡Señor! que me ayuden./ Yo a mi vez prometo/ en plan solidario,/ auxiliar a aquellos que lo necesiten,/ mientras pueda prestarles/ mi brazo o mi mente, ayuda o consejo.

    ¡Sea así!/ que se cumpla Tu ley,/ Sempiterno instrumento del bien;/ la que da a cada uno lo suyo,/ conforme a sus obras y según su grado,/ por siglos de siglos, ¡Amén!.

    Al terminar la lectura, algo había sucedido entre los presentes, parecía que una corriente de energía superior hubiera llegado a aquel humilde cubil desde el infinito. Así nos lo describe el Dr. Eduardo Alfonso cuando a continuación comenta:

    "El espíritu, que todo lo purifica, había hecho de aquella "zorrera" un templo. Estábamos transfigurados y no sabíamos si aquel seguía siendo un presidio. Los petates se nos antojaban cómodos butacones; la luz verde y tristona que entraba por el ventanuco se nos figuraba tamizada por ricas y policromas vidrieras de Hans Holbein; hasta el ambiente preñado antes de carátulas sombrías y visiones astrales, se había tornado diáfano y luminoso al conjunto de aquellas líneas bellas o inspiradas".

    Bien puede considerarse el escrito del Profesor Asmara como un profundo y bellísimo ensayo de trascendentes implicaciones filosóficas y morales, utilizando como base la misma conformación básica de la tradicional oración católica que resume, según esa religión, parte importante de las enseñanzas espirituales atribuidas a Jesús. Y al igual que Kardec realizó un estudio de los Evangelios a la luz de la Doctrina Espírita, el anterior comentario es, sin duda, una recreación del Padre Nuestro católico bajo la óptica del Espiritismo y una magnífica interpretación de esas supuestas enseñanzas de Jesús realizada desde la perspectiva superior que proporciona la "Doctrina de los Espíritus".

    GRUPO ESPÍRITA DE LA PALMA
     Julio de 1999


1 El pseudónimo "Asmara", con el que firmaba sus escritos, fue adoptado por el Sr. Esuardo Anaya Mena al haber estado en su  juventud viviendo durante algún tiempo en la ciudad del mismo nombre, por entonces capital de Etiopía.

2 Imp. Grafson, Esplugues de Llobregat (Barcelona), 1983.

3 En la transcripción hemos respetado la estructura del escrito, tal y como lo recogió y publicó el Dr. Eduardo Alfonso.



O Tempo e o Presente, Luis de Almeida, Portugal

    Santo Agostinho pela primeira vez, foi defrontado com uma questão, deveras difícil; «Que fez Deus antes de criar o Universo?». Assim este sábio, respondeu que o "tempo" era uma propriedade do Universo, e Deus, o tinha criado em simultâneo, e portanto não existia antes do seu começo.

    Com a teoria do «Big Bang», esta questão, ficou resolvida, pois os cientistas, afirmam que o tempo começou com a «Grande Explosão», no sentido em que antes nada podia ser definido, muito menos o tempo. Allan Kardec afirma In "A Gênese" «O tempo é a sucessão das coisas (...) no começo da Gênese (no nascimento do nosso planeta) o tempo ainda não sairia do misterioso berço da Natureza e ninguém pode dizer em que época de séculos nos achamos, porquanto o balancim dos séculos ainda não foi posto em movimento».

    Agora que sabemos, que o tempo é uma característica do Universo, os cientistas preocupam-se, em estudar e descobrir as leis que regem o Universo, de acordo com o tempo. Se soubermos como é o Universo num dado momento, essas leis explicar-nos-ão, como ele será mais tarde.  Com a teoria da relatividade, a ideia de tempo absoluto caiu por terra. Pois cada observador, obtinha uma medida diferente, dependendo do local que se encontrava, pois tudo está em movimento. Desta forma, o tempo combina-se com o espaço, para formar um novo conceito, o espaço-tempo.  Um acontecimento que surja num determinado ponto do espaço, e numa determinada ocasião, terá que ser especificada por quatro coordenadas, três espaciais, e o tempo (x,y,z, t).

    Se uma emissão de luz, for emitida num determinado tempo, e num ponto do espaço, à medida que o tempo passa, a luz propaga-se como uma esfera, cuja a posição e tamanhos, são independentes da fonte emissora. Passado um determinado tempo, como dois milionésimos de segundo, o raio da esfera terá seiscentos metros, e assim sucessivamente. É exactamente, como se atirássemos uma pedra a um lago, e a ondulação provocada, se propagasse na superfície desse lago, cada vez mais, a aumentar o seu raio. A ondulação propaga-se em circulo, que aumenta à medida que o tempo passa.

    A luz que se propagou, desde o inicio da sua emissão, forma um cone tridimensional, no espaço-tempo quadrimensional.. A este cone chama-se a luz futura do acontecimento, ou seja da fonte emissora. Deste modo podemos, desenhar um outro cone, chamado de luz pretérita, que constitui o conjunto de acontecimentos, de que um impulso de luz, é capaz de alcançar o acontecimento dado. Assim teremos dois cones um deles invertido, formando uma espécie de ampulheta, em que o momento em que os dois cones se tocam, é o acontecimento presente. O futuro absoluto do acontecimento, é a região dentro do cone da luz futura, ou seja, são todos os acontecimentos, que poderão ser afectados pelo acontecimento. O passado absoluto será a região dentro do cone de luz pretérita, nada mais que os acontecimentos a partir dos quais, os sinais propagam-se a uma velocidade igual ou inferior à da luz, e atingem este acontecimento, tendo a possibilidade, de afectar o acontecimento.

    Estes cones, o futuro, o passado, e o acontecimento, dividem o espaço em três regiões.

    Assim, se soubermos o que se está a passar dentro do cone de luz pretérita, poderemos prever, o que se estará a passar com a fonte emissora (o acontecimento), e por consequência o futuro da luz.

    Para tornar esta teoria mais simples focaremos dois exemplos: Se o sol deixasse agora, de emitir luz, não nos afectaria, porque estamos fora do acontecimento, quando este se apaga, ou seja, estamos fora do cone de luz. Somente passados 8 minutos, é que daríamos conta, pois é o tempo que este leva a chegar a nós, só neste altura é que os acontecimentos no nosso planeta, ficariam no cone da luz futura do acontecimento antes deste morrer.

    Assim, neste preciso momento, não sabemos o que se estará a passar no Universo mais longínquo, pois no caso dos astros mais afastados de nós, a sua luz propagou-se de lá à cerca de 8 mil milhões de anos. Desta forma, quando olhamos para o universo estamos a vê-lo como ele era no passado.

    Dois gémeos, um deles ficou na terra, o outro foi fazer uma viagem interplanetária, numa nave a uma velocidade próxima da luz, quando o astronauta regressou, o seu irmão gémeo, ou tinha já morrido de velhice, ou estava muito mais velho, que o astronauta, dependendo do tempo de viagem. Este exemplo na comunidade cientifica é conhecido, pelo paradoxo dos gémeos.

    Mas, só será paradoxo, se tivermos em mente o conceito clássico de tempo, como absoluto.

    Einstein provou que o tempo absoluto não existe, mas cada indivíduo tem a sua medida pessoal de tempo, dependendo de onde se encontra e da maneira que se move. Allan Kardec afirma In "A Gênese", ver Cap. XVI «Os espíritos desmaterializados, o espaço e o tempo não existem para eles. Mas, a extensão e penetração da vista são proporcionais à depuração deles e à elevação que alcançaram na vida espiritual.»

    Complementaremos, esta teoria, com uma outra, antes de explicarmos, qual o objectivo pretendido, embora deixando já algo no ar.

    A maior aposta dos físicos, é a «Teoria da Unificação Geral da Física», ou seja a combinação ou fusão entre a «Teoria da Relatividade», com a «Mecânica Quântica», juntamente com as teorias parciais, como a «Gravidade» e etc.  Mas toda esta teoria cientifica, continua em estudo e evolução, pois os físicos sabem, que deverá haver uma teoria única, que explique tudo, no Universo. Mas, como é bastante difícil e moroso, estes começaram e bem, pela fusão de teorias parciais, para no final então, como esperam, podendo demorar muitos anos, chegarem à tão esperada "Teoria da Grande Unificação". Einstein, foi um dos maiores impulsionadores, mas sem um sucesso aparente, e assim, sua obra foi continuada, pelos físicos modernos.

    Quando se tentou unificar a "Mecânica Quântica" com a "Gravidade", foi necessário introduzir-se, o conceito de «tempo imaginário».  Allan Kardec afirma In "A Gênese"«Tantos mundos haja na vasta expansão, tantos tempos diversos haverá e incompatíveis» Os físicos, já se interrogam sobre este novo conceito, se não será mais do que o «tempo real», embora visto de outra forma. O «tempo imaginário» não se distingue das regiões do espaço, desta forma tanto se pode ir para o futuro como para o passado, afirmam os cientistas. Cientistas estes, com credibilidade, na comunidade cientifica, não nos referimos a pseudocientistas, que infelizmente existem espalhados pelos quatro cantos do planeta.

    Por tudo isto se comprova teoricamente, é certo, e ainda em fase embrionária, o que Allan Kardec nos afirma In "A Gênese" «(...) com a conformidade do grau de sua perfeição, possa um Espirito abarcar um período de alguns anos, séculos, mesmo de milhares de anos, porquanto é um século em face do Infinito? (...) Ele vê simultaneamente o começo e o fim de um período; todos os eventos que nesse período constituem o futuro para o homem da terra, são o presente para ele. (...) Para Deus, o passado e o futuro, são o presente», o futuro será sempre, o que hoje, fizermos dele.




Comentários
Tempo e Livre Arbitrio, Luiz Gustavo, Brasil

"a semeadura é livre , mas a colheita é obrigatória ..."
Jesus
    Caros irmãos ,
    paz em Jesus !

            O confrade João Vieira nos prestou valiosa contribuição ao levar-nos sua dúvida em relação ao TEMPO , presente no Boletim 346 .

    Pareceu-me que a dúvida residia na dificuldade em relacionarmos o livre-arbítrio a previsibilidade do tempo , ou por outra, a idéia de um futuro a se determinar segundo nossas ações , livres e independentes , (portanto,uma linha temporal incerta e ainda por desenvolver-se) ; torna-se incompatível com um TEMPO que se assemelha a uma estrada já construída que pode ser percorrida de frente para trás ou vice-versa.

    Tal questão também nos embaraça : como podemos ter liberdade de ação se imaginarmos um futuro previsível e,assim, já determinado ? Afinal , o livre-arbítrio é o instrumento de que se serve o homem para construir o próprio destino ! Ante a essa assertiva é que convido aos amigos do boletim a examinarem mais de perto a relação de causalidade que determina nossas vidas .

    Todo o nosso futuro tem como base a vida presente , tanto quanto de nossa vontade depende o porvir desditoso ou feliz. Isto porque todas as nossas ações produzem consequências para nós. A existência carnal que partilhamos é um grande corolário dessa Lei de Causa e Efeito (ou ação e reação): a família em que nascemos , o lar em que moramos , os companheiros que temos alegria de abraçar , as dificuldades que encontramos e os Talentos que nos foram concedidos todos se encontram na conta de nossos atos posteriores .

    Temos aquele tombo da escada , fruto da imprudência ao subir ; o resfriado originado pela exposição demasiada as intempéries ; o projeto bem feito graças ao esforço de dias de trabalho ou a consciência tranquila em decorrência do cumprimento do dever.

    Ao nascermos , já estão delineados os passos que deveremos trilhar em busca da redenção espiritual . O programa reencarnatório ,  feito nos moldes de nossas necessidades , mostra-nos a direção certa a seguir . Mas para que possamos crescer , é necessário que tomemos o rumo do amor por nossos próprios méritos .

    Vemos aí , um conjunto de fatos perfeitamente previsíveis sem nos encontrarmos impedidos de termos livre-arbítrio .

    O futuro é feito das consequências de nossos atos .

    As vertentes expostas na pergunta sobre o TEMPO não são totalmente contrárias . Antes , vemos que co-existem : as provações pelas quais iremos passar são nada mais , nada menos , que a ' volta ' das escolhas que fizemos ou fazemos .

    Pensemos que o Tempo é uma estrada ensolarada . Nós somos os viajores do terreno . A sombra que se faz atrás de nosso corpo ante a incidência dos raios da manhã chama-se PASSADO . Ao levantarmos o rosto veremos alguma extensão de terra a nossa frente até chegarmos a linha do horizonte , eis o PRESENTE . Além da linha do horizonte encontra-se o FUTURO . A idéia que temos do passeio está limitada ao alcance da visão da paisagem . A medida que amadurecemos espiritualmente  , essa visão se amplia e ganha contornos diferentes . Pode-se ver a frente de quem não tem o mesmo alcance e por isso conhecer o que há de vir .

    E  , reparemos , as paragens do FUTURO na estrada do Tempo possuem contornos que dependem da visão que se tem delas . É como se, embora já estivesse delineada , está em constante período de obras.

    Deus , que é nosso Pai amoroso , nos criou com uma Destinação : a Felicidade Suprema . Ela vai aparecendo a medida que nós desenvolvemos as nossas potencialidades , mas cabe a nós atingirmos esse conjunto de virtudes .

    Essa Destinação vêmo-la ainda como futuro , e lhes digo que é um futuro certo .

     Nessa ocasião recordo de um sonho contado por meu avô a alguns anos e com ele me despeço cordialmente dos irmãos em Cristo fazendo votos de que o ligeiro comentário a cerca de tão interessante questão possa ter lançado pequenino lume favorecendo reflexões posteriores .

    "Encontravasse meu avô voando acima de umafloresta de pinheiros . Considerava-se o mais ditoso dos homens pois a sensação daquele planar era agradabilíssima . Quando em determinado instante aparece um homem que igualmente voava e que chegou ao seu lado , então meu avô perguntou :

    - Esse lugar é bonito , mas é estranho . Que lugar é aquele que eu vi logo atrás ?

    Meu avô referia-se a região extensa e extremamente escura , uma parte da floresta completamente em sombras .

    - Ah ... esse é o seu passado - redarguiu o estranho .

    Pegando meu avô de surpresa , pois ele estava olhando a paisagem negra , visão essa que o assustava , o viajante desconhecido chamou a sua atenção com um pedido .

     - Olhe bem a sua frente ! ...

    Apresentava-se um lindo alvorecer iluminando as folhas dos pinheiros .

    Maravilhado , vovô disse :

    - Mais que bonito ! Um alvorecer sobre as árvores ! Mas que miragem linda é essa ?!

    - Essa visão é o seu futuro ... "



Tempo, Rogério Amaral, Brasil

    A cerca do questionamento sobre o TEMPO feito pelo colega João Vieira no Boletim 346, recomendo a todos os interessados a leitura da primeira parte do livro Urânia de Camille Flammarion. Ele tinha estes mesmos quetionamentos e se preocupava muito em entender a questão da Infinidade e da Eternidade. Sua intensa vontade de conhecer estas respostas (há mais de 100 anos), aliada a sua mediunidade e o auxílio de um espírito superior o faz experimentar um desdobramento em que conhece muitíssimo além do Universo conhecido e viaja a um mundo com 3 sóis, entre outros; além da chance de observar o passado da Terra, assim como nós enchergamos a luz emititida há milhares de anos por estrelas que nem mais existem hoje. É uma empolgante narrativa feita sem o conhecimento da Teoria da Relatividade, mas que nos faz compreender mais a Infinidade e a Eternidade.



Tempo,   Silvio Corrêa, Brasil

(referente a pergunta Tempo & Livre Arbítrio, enviada por João Vieira, Boletim  346)




Prezado João Vieira,

    Imaginemos, por um momento, que eu vá fazer uma viagem longa. Digamos de Porto Alegre à Manaus, dirigindo um veículo.

    Terei que programar várias etapas. As cidades turísticas que desejo conhecer durante o trajeto, o tempo estimado para atingir o objetivo, quanto tempo vou dirigir por dia, que estradas irei seguir e demais detalhes importantes. Tento ao máximo me precaver, mas imprevistos podem ocorrer.

    O que eu penso João, é que esse planejamento é o nosso destino, assim como houve também um planejamento prévio do nosso caminho, nessa nossa etapa reencarnatória, muitos dos quais planejados por nós mesmos.

    Como me referi na viagem hipotética, imprevistos podem ocorrer e normalmente ocorrem quando se trata de uma viagem longa. É justamente nesses imprevistos, quando temos que decidir, que entra em jogo o nosso livre arbítrio.

    Assim também ocorre com a nossa vida. Vivemos nossos imprevistos e decidimos o caminho a percorrer, que surgem nos imprevistos. Um deles, com certeza, seria, podemos dizer, o caminho natural, mas às vezes, por vários motivos, escolhemos outro caminho. Surge outra bifurcação e novamente nosso livre arbítrio entra no jogo. Poderá um caminho nos levar ao nosso trajeto pré-determinado e outro nos afastar ainda mais, depende da nossa escolha.

    Já tem um tempo que acostumei a fazer analogias com o nosso dia a dia e por um motivo simples. Por mais que cresçamos espiritualmente, por mais que atravessemos nossas etapas reencarnatórias, será sempre a nossa vida, o nosso dia a dia.

    Como saber o caminho certo ? Eu, particularmente não sei. Tento seguir 4 princípios fundamentais (Honestidade, Humildade, Humanidade, Honra), baseados no Amor ao próximo e na Lei da Causa e Efeito, que servem como alicerce das minhas decisões.

    Quanto a dimensão do tempo, permita que eu faça uma outra analogia.

    Estou dirigindo em uma estrada montanhosa e tenho a percepção exata das 3 dimensões. Entretanto, você, que está em um helicóptero, consegue ver a minha dimensão tempo pois tem uma visão ampliada do meu caminho. Você percebe então que duas colinas, à frente, na estrada, existe uma ponte que acabou de cair. Você está prevendo o meu destino; que eu caia no abismo, pois esta seria a consequência natural. Mas acontece um imprevisto e o pneu do meu carro fura e nesse meio tempo passa alguém e me avisa que a ponte caiu e que terei que fazer um novo trajeto para continuar meu caminho.

    Concluo João, dizendo para você que na minha opinião, coexistem o destino e o livre arbítrio, sem serem paradoxais.

    Que Jesus nos dê força e perseverança para seguirmos o nosso caminho, pois ao nosso lado, Ele estará sempre.

    Um forte abraço
    Silvio Corrêa



Tempo, Juarez Perissé, Brasil

    Gostei do questionamento apresentado pelo João Vieira (Boletim 346). A questão de um futuro determinado sempre me pareceu incompatível com o nosso livre arbítrio. Obras do Hermínio Miranda, na minha opinião um excelente autor, como Memória e o Tempo só vieram aumentar meu questionamento.

   De modo a enriquecer a discussão sem em nenhum momento acreditar estar fechando questão (aliás, como eu gostaria de uma resposta plenamente satisfatória) apresento minha visão (a que eu convivo atualmente) da questão:

1) Somos os construtores do nosso destino, ou seja, determinamos a trajetória que desejarmos em nossas vidas.

2) Poder-se-ia antever determinados pontos do futuro através de janelas que se abririam por diversos motivos (em outra oportunidade podemos discutir os motivos).

3) Existiriam, na verdade, vários futuros possíveis, e a janela que se abriria nos mostraria um ou alguns.

Obs: É como se existissem várias estradas (possibilidades) que seriam trilhadas de acordo com o nosso ivre-arbítrio.
 4) Deste modo, algumas vezes poder-se-á antever um futuro que nunca venha a acontecer porque a pessoa acabou optando por outro caminho.
Obs: É provável que um Espírito mais preparado consiga discernir dentre os possíveis futuros qual seria o mais provável face ao perfil que a pessoa apresenta no presente.
    Fica aí minha contribuição. Um grande abraço a todos,
    Juarez Perissé



Painel
CEDAK - 65 Anos, Henrique Fernandes, Brasil

CRUZADA ESPÍRITA DISCÍPULOS DE ALLAN KARDEC

 PROGRAMAÇÃO:

    05 set - O Espiritismo no Futuro da Humanidade - Milton Menezes
    12 set - Os Rumos da Educação Espírita Infanto-Juvenil - Lúcia Cardoso
    19 set - Espiritismo, Educação e Cidadania - Darléia Maia
    26 set - O Centro Espírita no Novo Milênio - Cirlei Bastos

    Horário: 17 horas
    Rua Dr. Gastão Reis, 60 - Bairro Paulicéia
    25.080-040 - Duque de Caxias - RJ
    E-mail: cedak@zipmail.com.br


 
GRUPO DE ESTUDOS AVANÇADOS ESPÍRITAS